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Historia de Nuestra Señora de Arántzazu
El Santuario de Nuestra Señora de Aránzazu está situado en el límite entre las provincias de Álava y Guipúzcoa, a nueve Kilómetros de la villa de Oñate.
El lugar es impresionante, por los macizos rocosos que lo rodean, por los profundos barrancos y desfiladeros, y por la vegetación frondosa y tupida que pulula por doquier, revistiendo y recubriendo las mismas rocas. Está a 714 metros sobre el nivel del mar, en la falda del Aloña.
El actual Santuario fue iniciado el 9 de Septiembre de 1950, de la mano de los arquitectos Saenz de Oiza y Luis Laorga y vino a sustituir a los anteriores que habían sido destruidos por tres terribles incendios en 1553, 1622 y 1834.
La imagen de Nuestra Señora de Aránzazu es de piedra; pertenece al románico más tardío, datándola los entendidos, en los años finales del siglo XIII o en los primeros del XIV. Se cataloga entre las imágenes llamadas Majestad, con el Niño, desnudo, apoyado sobre la rodilla izquierda. Mide unos 36 cm y durante siglos la vistieron con ricos mantos que la hacían aparecer estática y con el doble de altura de la que tiene en realidad.
Se asienta sobre un espino sobre el cual, algunos no dudan en asegurar, es el mismo sobre el que, según cuenta la leyenda, se apareció La Virgen al pastor.
Fue coronada canónicamente en 1886 y proclamada Patrona de Guipúzcoa el 9 de Septiembre de 1918.
Leyenda de la Aparición de la Imagen de la Virgen de Aránzazu
Corría el año 1469, un pastor llamado Rodrigo Balzategui de 18 años andaba pastoreando su ganado en las laderas de una montaña llamada Alona, por la parte que se divide Guipúzcoa de Álava, cuando de pronto vio que de las ramas de un espino se divisaba un bulto que parecía tener forma humana.
Ante su asombro, se fue acercando despacio al lugar en donde permanecía el bulto y, finalmente, se dio cuenta de que quien estaba encima del espino era una bellísima mujer que portaba un Niño en sus brazos; viniendo a reconocer el pastor que se trataba de La Santísima Virgen y de su Santísimo Hijo.
El pastor, postrado en tierra y con sumisión reverente ante la Santa Imagen, dijo en su propio idioma vascongado:
¿Aránzazu?
Que en castellano significa: ¿Vos en el espino?, y de ahí que desde entonces se le invoque a la imagen de la Virgen como Nuestra Señora de Aránzazu.
Cuando el pastor se dirigió al pueblo para contar lo que había visto se encontró a las autoridades, al pueblo y al clero haciendo una procesión penitencial para solicitar al Cielo el cese de una grave sequía que había dejado a los campos estériles.
Fue entonces cuando el pastor se dirigió al pueblo con estas palabras:
“Señores y hermanos míos, para qué os cansáis en hacer semejantes procesiones para aplacar el enojo divino: Os atestiguo que a corta distancia de aquí hallaréis una santica sobre un espino; y esta Señora está sin casa, sin ermita y al descubierto, y si no resolvéis ir a visitarla en procesión no lloverá”
Alentados por estas palabras, todos acompañaron al pastor al lugar donde él decía haber visto a la Bella Señora. Comprobaron con sus propios ojos que se trataba de La Santísima Virgen y después de dedicarle sus oraciones, empezaron las tan ansiadas lluvias que le pidieron en sus plegarias.
Pensaron las autoridades que no era aquel el lugar adecuado para dar culto a La Santísima Virgen, dado lo difícil y escarpado del lugar, y decidieron trasladar la imagen a Oñate, contra el parecer del pastor.
Parecía que no coincidían la voluntad del pueblo con la voluntad de La Santísima Virgen pues tantas veces se trasladó la imagen a la iglesia parroquial del pueblo, la imagen desaparecía misteriosamente y volvía a aparecer de nuevo en el lugar primitivo.
Ello les llevó a la convicción de que debían construir en el lugar una ermita, y así lo hicieron. Al principio dicha ermita quedó al cuidado de una beata, para posteriormente dar paso a los PP Mercedarios.
Junto al espino donde tenía asiento la imagen sagrada, había una campana con cuyo sonido fue atraído el pastor hasta el lugar del descubrimiento. Durante decenios estuvo colgada en un claustro del convento y ahora se encuentra junto a los pies de la imagen de La Virgen.
Cómo llegar al Santuario de Nuestra Señora de Arantzazu
La población más cercana es Oñate, que se llega por la carretera GI 2.630. Una vez nos encontramos en esta localidad se toma la bifurcación a mano derecha hacia el barrio de Uribarri. A la altura de Urteagain se sigue derecho dirección a Aránzazu, dejando a mano derecha la carretera que lleva al barrio de Arotz.
Diez lugares imprescindibles para visitar cerca del Santuario de Nuestra Señora de Aránzazu
Oñate
(A 10 Km de distancia del Santuario de Aránzazu).
Destacando a visitar: el edificio del Ayuntamiento, de estilo barroco rococó y construido en el año 1778; la Universidad Sancti Spiritus; fue la primera Universidad del País Vasco.
La iglesia de San Miguel Arcángel, de estilo gótico, cuyo retablo mayor de estilo barroco churrigueresco, está dedicado a San Miguel Arcángel, obra de Juan Bautista de Suso.
Ruta de senderismo Ojo de Aitzulo desde Araotz
Preciosa ruta de senderismo de 8 km, circular, que se encuentra a medio camino entre Oñate y el Santuario de Aránzazu.
Vitoria
(A 53 Km del Santuario de Aránzazu).
Es la capital de la Comunidad Autónoma del País Vasco, situada en el Norte de España.
Destacando a visitar: La Catedral gótica de Santa María; La Plaza de La Virgen Blanca (llamada la Plaza Vieja) es la plaza principal de Vitoria; La iglesia de San Miguel.
Ermita la Antigua
(A 34 Km del Santuario de Aránzazu).
Conocida también como la ermita de Santa María de Zumárraga, es uno de los templos más llamativos del País Vasco, y es considerada por muchos como la Catedral de las ermitas vascas.
Se construyó en el siglo XV sobre un edificio defensivo del siglo XII.
Forma parte de la Ruta de los 3 templos junto al Santuario de Aránzazu y el Santuario de San Ignacio de Loyola.
Santuario de San Ignacio de Loyola
(A 55 Km del Santuario de Aránzazu).
El Santuario Basílica de San Ignacio de Loyola, es un conjunto monumental y religioso. Fue construido entre 1688 y 1888.
Está construido alrededor de la casa natal de San Ignacio, a orillas del río Urola en la población de Azpeitia.
El Santuario de Loyola cuenta con una de las bibliotecas más ricas de todo el territorio, con más de 300.000 ejemplares, entre los que destacan los libros y las partituras.
Ignacio de Loyola fue el fundador de la Compañía de Jesús conocida como los Jesuitas.
Forma parte también de la Ruta de los 3 templos, junto con el Santuario de Aránzazu y la Ermita de la Antigua.
Ezkioga-Itsaso
(A 41 Km del Santuario de Aránzazu).
En este lugar, tuvieron lugar unas apariciones de La Virgen María durante los años (1931-1934), justo 50 años antes que las Apariciones en Medjugorje; pero nunca unas apariciones de La Virgen han sido tan controvertidas, impugnadas y silenciadas.
Las Apariciones comenzaron el 30 de Junio de 1931 cuando los hermanos Antonia y Andrés Bereciartúa vieron por primera vez a La Virgen cuando bajaban del caserío Igarzábal-Erdi hacia su casa. La describen como una “Mater Dolorosa” y la singularidad de “estas apariciones” es que los videntes nunca entraron en trance, aunque quedaban como congestionados.
Entre los mensajes recibidos por los videntes destaca la predicción de La Guerra Civil española (1936-39) y, como ha hecho en la mayoría de sus “apariciones”, La Virgen hace una llamada urgente al rezo diario del Santo Rosario para resolver los problemas que amenazan a la Humanidad.
Estas “Apariciones” nunca fueron aprobadas por la iglesia, a pesar de que se han escrito muchos libros defendiendo su autenticidad.
Entre ellos destaca el que ha escrito el Padre Pasionista Doctor Don Antonio María Artola, una de las personas que más ha investigado sobre este tema.-“¿Qué pasó en Ezquioga? Pequeña historia de las Apariciones”.
Zarautz
(A 68 Km del Santuario de Aránzazu).
Es uno de los principales centros de veraneo del País Vasco; en gran parte debido a su magnífica playa y también a su gastronomía.
La playa, con más de 3 Km de longitud, atrae durante todo el verano a miles de turistas y surfistas.
Las principales atracciones para ver son: La Iglesia Parroquial de Santa María Real; el Museo de Arte e Historia de Zarautz; el Palacio de Narros (perteneciente al ducado de Villahermosa) y donde pasó muchos veranos la Reina Isabel II de España.
En cuanto a la gastronomía se puede visitar el restaurante del afamado cocinero Karlos Arguiñano.
Getaria
(A 65 Km del Santuario de Aránzazu).
Encantador pueblo pesquero, famoso porque fue la localidad natal de Juan Sebastián Elkano y el modista Cristóbal Balenciaga.
También atrae a un gran número de turistas debido a su excelente gastronomía. Se puede degustar un magnífico pescado recién sacado del mar, acompañado del vino local llamado Txakoli.
Bilbao
(A 74 Km del Santuario de Aránzazu).
En 1997 se construyó el Museo Guggenheim y la ciudad de Bilbao se transformó para siempre. También puede presumir que su Museo de Bellas Artes alberga una de las mejores pinacotecas de España.
Hay que destacar que Bilbao alberga el famoso Puente Colgante de Portugalete, declarado Patrimonio de la Humanidad y que une los dos márgenes de la ría de Bilbao.
Axpe Achondo
(A 34,2 Km del Santuario de Aránzazu).
En este pequeño y precioso pueblo se encuentra el Asador Etxebarri, con una estrella Michelin y considerado el sexto mejor restaurante del mundo, según “The world’s 50 Best Restaurants”.