El primer ciclo de apariciones ocurrieron dentro de la Catedral.
Primera aparición:
En la primavera de 1947, se le apareció una hermosa señora que vestía túnica morada y cubría su cabeza con un velo blanco, tenía el pecho atravesado por tres espadas, su rostro estaba triste. Le corrían lágrimas hasta el suelo. Sus dulces labios se abrían para decir:
“Oración, Penitencia y reparación”
Y guardó silencio.
Segunda aparición:
El domingo 13 de Julio de 1947, en el hospital, se apareció nuevamente la madre de Dios. Vestía de blanco y en lugar de las tres espadas, tres rosas, blanca, roja y dorada adornaban su pecho. Pierina le preguntó asombrada:
“Por favor, dígame quién es usted”.
Con una dulce sonrisa la señora le contestó:
“Soy la madre de Jesús y la madre de todos vosotros”.
Después de una pausa prosiguió:
“Nuestro Señor me envió para para implantar una nueva devoción Mariana en todos los institutos, así masculinos como femeninos, en las comunidades religiosas y en todos los sacerdotes. Yo les prometo que si me veneran de esta manera especial gozarán de mi protección, y habrá un florecimiento de vocaciones religiosas. Deseo que el día 13 se me consagre como día Mariano, y que los doce anteriores sirvan de preparación con oraciones especiales. En ese día derramaré sobreabundancia de Gracias y santidad sobre quienes así me hubiesen honrado. Deseo que el 13 de Julio de cada año sea dedicado en honor de Rosa Mística.
Luego le explicó el significado de las tres espadas:
- La primera espada significa la pérdida culpable de la vocación sacerdotal o religiosa
- La segunda espada, la vida en pecado mortal de personas consagradas a Dios
- La tercera espada, la traición de aquellas personas que al abandonar su vocación sacerdotal o religiosa, pierden también la Fe y se convierten en enemigo de la Iglesia.
El significado de las tres rosas:
- La rosa blanca significa el espíritu de Oración
- La rosa roja, el espíritu de sacrificio (para reparar)
- La rosa dorada o amarilla, el espíritu de penitencia.
Tercera aparición el 27 de Octubre de 1947
En la capilla del hospital de Montichiari, durante la celebración Eucarística con asistencia de médicos, empleados y gente del lugar, hizo su aparición la hermosísima señora. Todos se percataron de una presencia extraordinaria pero solamente Pierina pudo verla y escucharla.
María, Rosa Mística pidió la práctica de la devoción que ya había recomendado y recalcó
“Mi divino Hijo, cansado de las ofensas, quiso descargar su justicia, pero me interpuse como Mediadora entre Él y los Hombres, intercediendo especialmente por las almas consagradas»
Pierina, la vidente, le dio las Gracias en nombre de todos y ella se despidió recomendándole con majestad y ternura:
“Vive de Amor, Amor al Prójimo”.
Cuarta aparición, 16 de Noviembre de 1947
La aparición de Rosa Mística a Pierina, en una iglesia parroquial de Montichiari, tuvo por testigos a varias personas, entre las que se encontraban algunos sacerdotes. Su mensaje puede reducirse a estas palabras:
“Mi divino Hijo Jesús y Señor Nuestro está hastiado de las muchas y graves ofensas que se le infieren, por tantos pecados contra la santa pureza. Le provoca desatar un diluvio de castigos…pero mi intercesión se ha interpuesto para que tenga compasión una vez más. Por eso pido en desagravio, oración y penitencia. Suplico íntimamente a los sacerdotes que amonesten a los hombres para que no sigan en la liviandad. Yo regalaré mi Gracia a quienes ayuden a explicar esos delitos»
¿Se nos perdonará entonces? Preguntó la vidente. Sí, en cuanto se dejen de cometer. Y con estas palabras se alejó.
Quinta aparición. 22 de Noviembre de 1947
Pierina le preguntó a nuestra Madre:
¿Qué debemos hacer para cumplir sus deseos de oración y penitencia?
Resplandeciente de bondad, contestó la Virgen: ¡Oración! Se hizo el silencio unos momentos y continuó
“penitencia quiere decir aceptar las pequeñas cruces diarias y realizar el trabajo cotidiano en espíritu de expiación.”
Y enseguida le dijo:
“El 8 de Diciembre, alrededor del mediodía vendré otra vez aquí y será la hora de Gracia. La Hora de Gracia será un acontecimiento de numerosas y grandes conversiones, almas totalmente endurecidas en el mal y frías como este mármol, tocadas por la divina Gracia volverán a ser fieles a Dios»
Sexta aparición, el 7 de Diciembre de 1947
Serena y majestuosa La Virgen llevaba un manto blanco y desde la cabeza le caía graciosamente en pliegue. Un niño se lo sostenía a la derecha y una niña a la Izquierda.
La Madre de Dios dijo:
“Mañana mostraré mi Inmaculado Corazón que es tan poco conocido por los hombres”.
Después de un corto silencio prosiguió:
“En Fátima propagué la consagración a mi Inmaculado Corazón, en Bonate procuré que penetrara entre las familias cristianas, aquí en Montichiari deseo implantar la devoción a Rosa Mística unida a la veneración de mi Inmaculado Corazón y deseo arraigarla especialmente en los conventos e institutos religiosos para que las almas consagradas a Dios obtengan aumento de Gracia a mi maternal Corazón»
Pierina le preguntó quiénes eran los niños que estaban a su lado, a lo que La Virgen respondió:
“Son Jacinta y Francisco, quienes te acompañarán a partir de ahora en todos tus contratiempos. Ellos también tuvieron que sufrir a pesar de haber sido mucho más pequeñitos que tú. Esto es lo que quiero de ti, sencillez y bondad a semejanza de estos niños»
Extendió entonces sus brazos hacia la Tierra en señal de protección y mirando hacia el cielo exclamó:
“Alabado sea el Señor”
Y desapareció.
Séptima aparición: El 8 de Diciembre de 1947
Pierina contempló a la madre de Dios decir:
“Yo soy la Inmaculada Concepción”
y con gran majestad afirmó:
“ Yo soy Maria de las Gracias, esto es la llena de Gracia, madre de mi Divino Hijo Jesucristo”, descendió suavemente por la escalera y añadió: “Por mi venida a Montichiari deseo ser invocada y venerada como Rosa Mística, quiero que al mediodía de cada 8 de Diciembre (Solemnidad de la Inmaculada) se celebre la hora de la Gracia por todo el Mundo; mediante esta devoción se alcanzarán muchas Gracias para el Alma y el Cuerpo. Nuestro Señor, mi Divino Hijo Jesús, concederá copiosamente su Misericordia, mientras los buenos recen por sus hermanos que permanecen en el pecado. Es preciso informar cuanto antes, al Supremo Pastor de la Iglesia Católica, el Papa Pio XII, mi deseo de que esta hora de Gracia sea conocida y extendida por todo el Mundo. Quien no pueda ir a la Iglesia, que sea en su casa, al Mediodía, y conseguirá Mis Gracias.
Luego mostrando su Purísimo Corazón exclamó:
“Mira este corazón que tanto ama a los hombres, mientras la mayoría de ellos lo colma de vituperios”
Y luego prosiguió:
“Si todos, buenos y malos se unen en oración, obtendrán de este corazón misericordia y Paz. Los buenos acaban de alcanzar por mi mediación la misericordia del Señor, que detuvo un Gran Castigo. Dentro de poco se conocerá la eficaz grandeza de esta Hora de Gracia.
LAS APARICIONES EN FONTANELLI
Año 1966
Pierina Gilli pasó varios años en Brescia como ayudante en un convento de religiosas por orden del Obispo Diocesano Monseñor Giacinto Tredici y el franciscano Giustino, sacerdote de gran fama que fue desde entonces su director espiritual.
La segunda etapa de las apariciones a Pierina empiezan en el año 1966 en Fontanelli, un campo de Montichiari donde se halla una fuente de agua escondida en una gruta. Una vieja grada de piedra con unos diez escalones da acceso a la cueva.
En Febrero, mientras Pierina rezaba en su cuarto, tuvo el privilegio de volver a ver a La Virgen, y la Madre de Dios le prometió para el Domingo 17 de Abril de 1966, su aparición en Fontanelli.
Informado el Obispo de Brescia de tal aparición, ordenó a Pierina guardar absoluto secreto sobre el tema.
Primera aparición en Fontanelli, 17 de Abril de 1966
Pierina rezaba el rosario paseándose en el camino, a poca distancia de la Gruta. A eso del mediodía, aproximadamente a la hora del Angelus, se le apareció la Madre de Dios y le dijo:
“Mi Hijo divino Jesús, con todo amor me mandó para dar un poder milagroso de curación a esta fuente. En señal de penitencia y purificación besa, de rodillas, el peldaño superior; ahora baja un poco más, siempre de rodillas y besa otra vez el peldaño»
La vidente descendió de espaldas y arrodillada y la Virgen le siguió. Sus inmaculados pies descalzos eran perfectamente visibles al posarse en los escalones. Por tercera vez le mandó:
“Besa las gradas y haz levantar aquí una cruz”
Y señaló con la mano izquierda el punto exacto donde quería que fuera colocada. Que los enfermos y todos mis Hijos pidan ante todo perdón a mi Divino Hijo. Besen con mucho Amor la Cruz y luego saquen agua de la Fuente y beban.
Nuestra Señora se acercó a la fuente y le dijo a Pierina:
“Coge barro con las manos y luego lávate. Esto te va a mostrar como el pecado es lodo y suciedad en el corazón de mis hijos, pero si se bañan con el agua de la Gracia, las almas quedarán purificadas y otra vez dignas de la amistad de Dios. Deseo que todos mis Hijos y todos los enfermos acudan a esta fuente milagrosa. Tu misión está en este lugar, en medio de los enfermos y de quienes necesitan»
La Virgen comenzó a elevarse hacia lo alto y abrió majestuosamente los brazos, a cuyo impulso se desplegó y extendió su manto que ocupó un espacio inmenso. Cobijadas por el manto, hacia la derecha, aparecieron la iglesia de Montichiari y la fortaleza o Castillo de María.
Segunda Aparición en Fontanelli. 13 de Mayo de 1966
La Virgen escogió el aniversario de las apariciones de la Virgen de Fátima para manifestarse de nuevo a Pierina, junto a la fuente, a las 11.40h. Se habían reunido en el lugar unas 20 personas.
“La noticia de mi venida aquí a la fuente debe ser conocida y difundida por todas partes”
Pierina preguntó: ¿Cómo podré hacerlo si no me creen y me impiden actuar?
La Virgen le responde:
“Aquí está tu misión, así como te lo exigí”
Oh Madre de Dios, sin un milagro suyo que acredite sus palabras, las autoridades eclesiásticas no me prestarán atención. Yo le pido que haga un milagro para que me crean.
“Yo he venido a Montichiari a prodigar las Gracias de mi Divino Hijo Jesús, pero para salvar a la humanidad hace falta Oración, Sacrificio y Penitencia»
Después señaló la fuente hacia la derecha y dijo:
“Deseo que aquí se construya un baño cómodo, alimentado por esta agua, en donde se pueda sumergir a los enfermos»
Y señalando hacia la izquierda dijo:
“Esa otra parte de la fuente debe de reservarse para beber”.
Pierina le preguntó el nombre que debía llevar la fuente y dijo:
“Que se llame la Fuente de La Gracia”
La Virgen le pidió a Pierina que hiciese acuñar una moneda según este modelo:
Por un lado, “Rosa Mística” y por el otro “María, Madre de la Iglesia”