Año de la Aparición
1608
Lugar: Siluva. (Lituania)
Siluva es una pequeña aldea situada a 194,4 km de Vilna (Capital de Lituania); en la región de Samogitia.
Siluva es una pequeña aldea situada a 194,4 km de Vilna (Capital de Lituania); en la región de Samogitia.
Antes del siglo XVI la iglesia católica tenía un dominio social, cultural y religioso de la sociedad. En este clima, aún favorable para la propagación de la Fe Católica, las Apariciones de la Virgen María se producían de forma recurrente y eran apreciadas por los creyentes.
Después de la reforma protestante, la devoción a la Virgen María se vio atacada y por supuesto también las Apariciones de Nuestra Señora.
El siglo XVII es el menos cristiano de todos los tiempos.
A partir del siglo XVII católicos y protestantes han estado en desacuerdo en muchas cuestiones mariológicas.
Los protestantes:
El conflicto entre católicos y protestantes distó mucho de ser pacífico. Durante los siglos XV-XVI se desencadenaron cruentas guerras entre ambos bandos.
Los conflictos bélicos más famosos fueron las “Guerras de Religión” en Francia y la “Guerra de Treinta Años” en el Sacro Imperio Romano Germánico (actual Alemania).
Cuando la reforma protestante se cernió sobre Europa, tampoco este pequeño pueblo de Siluva puedo eludir sus efectos. Los católicos de Siluva se sintieron indefensos ante la represión de su Fe por parte de la nobleza; se iban a confiscar las propiedades de la Iglesia y la Tierra iba a ser entregada a los calvinistas.
En 1532, el gobernador local se convirtió en un calvinista acérrimo, al igual que muchos nobles e intelectuales…ellos, a su vez, impusieron su voluntad al pueblo.
Cuando el párroco de la iglesia de Siluva, Fr. John Holubka se dio cuenta de lo que iba a ocurrir, construyó una caja, envolvió cuidadosamente la pintura de La Virgen María, los vestidos litúrgicos y los documentos que probaban que Vytautas el Grande había donado esa tierra a la Iglesia católica, y los colocó cuidadosamente en la caja. Después, cerró bien la caja y la enterró cerca de una gran roca.
Al cabo de poco tiempo, las autoridades tomaron la iglesia. Daba la sensación de que la Fe Católica se hubiera esfumado de la aldea de Siluva.
Habían pasado ochenta años, y los católicos de Siluva, sin pastor y sin guía espiritual habían ido desapareciendo gradualmente de la aldea de Siluva. Solamente los más ancianos del lugar recordaban que, tiempo atrás, había existido allí una iglesia católica. Los niños habían crecido rezando el credo calvinista.
Transcurría el verano del año 1608, y unos pastorcillos pastoreaban con sus ovejas cerca de la aldea de Siluva, cuando de repente ven a una hermosa mujer. Jugaban cerca de una gran roca cuando, uno después de otro, se quedaron quietos mirando fijamente en dirección a la roca. En medio del silencio se podía oír un fuerte llanto. En aquel momento los niños pudieron ver una mujer joven, muy bella, con un niño en brazos y que posaba sus pies encima de una roca. Lloraba amargamente, su pena era evidente. Ella no habló pero les miraba con gran tristeza como si su corazón se estuviera partiendo en dos.
Sus lágrimas rodaban por sus mejillas y llegaron a salpicar la gran roca. Su vestido era azul y blanco, muy distinto a los vestidos que los niños estaban acostumbrados a ver. Su pelo castaño caía con suavidad sobre sus hombros. Una luz extraña rodeaba a aquella hermosa mujer y al niño.
Estaban tan perplejos los niños que ni siquiera podían articular palabra, solo miraban fijamente a la bella Señora, pero el asombro dio lugar al miedo en el momento en que la misteriosa Mujer desapareció tan de repente como había aparecido.
Uno de los muchachos bajó al pueblo para explicarle al pastor calvinista lo que acababan de ver. Éste le dijo que dejara de contar fantasías y que volviera de nuevo a los campos.
Por la tarde, cuando los chicos volvieron a su casa, relataron a sus padres lo que habían visto y, ante la total estupefacción de la gente de la aldea, a la mañana siguiente se congregaron todos alrededor de la roca donde los niños afirmaban que habían visto a la misteriosa señora.
Lo que más les llamaba la atención a los habitantes de Siluva era que el relato de los pequeños, preguntados cada uno por separado, coincidía exactamente en cada uno de los más pequeños detalles.
El pastor calvinista, al enterarse de que la gente se estaba congregando en aquel lugar, también quiso acudir para concienciar a la población de que aquello era tan solo una fantasía de los pequeños.
En aquel instante, todos pudieron oír de nuevo el llanto desgarrado de una mujer. Volvieron sus miradas a la roca y pudieron ver a La Señora, con el niño en brazos, parada en aquel lugar y con el aspecto idéntico al que los niños habían descrito. El pastor calvinista no podía salir de su asombro y también la miraba con estupefacción.
El pastor calvinista, una vez que pudo recuperar la serenidad, le preguntó:
¿Por qué llora usted?
A lo que la Señora contestó:
Hubo una época en que mi amado Hijo era adorado por el pueblo en este mismo lugar; pero ahora han entregado este Sagrado Suelo al arado, a la siembra y a los animales de pasto.
Sin mediar más palabra, Ella desapareció.
Después de que la gente pudiera escuchar este mensaje, el pueblo creyó y volvió a la Fe Católica.
Tan grande fue la conversión de la población que al año siguiente, en la fiesta de La Natividad de La Virgen María, más de 11.000 personas recibieron la comunión en el lugar de las Apariciones.
Un hombre ciego, de más de cien años, vivía en una aldea cercana y recordó que unos ochenta años atrás, él mismo había ayudado al padre Holubka a enterrar un cofre con los tesoros de la iglesia cerca de la gran roca.
Los aldeanos lo condujeron al campo de las apariciones para ver si él podría ayudarles a encontrar el sitio exacto donde se había enterrado la caja. Al llegar al lugar, su vista fue restaurada milagrosamente y señaló el lugar donde se había enterrado el cofre.
Se pudo desenterrar el tesoro y la caja se encontraba en perfecto estado, con la pintura grande de “La Maddona con el niño”; varios cálices de oro, vestiduras, títulos de La Iglesia y otros documentos.
La pintura fue colocada en la Basílica de la Natividad de La Virgen María donde en la actualidad sigue siendo venerada como la imagen milagrosa de Siluva.
Los milagros se fueron sucediendo y cada vez acudían más peregrinos hasta que la Segunda Guerra Mundial acabó con la libertad en Lituania.
La iglesia se tuvo que ir ampliando debido al gran número de peregrinos que llegaban cada año. Los milagros que sucedieron muchas veces eran a personas no creyentes.
Esta Aparición fue reconocida por un Decreto Papal publicado por PIO VI el 17 de Agosto de 1775.
Siluva se encuentra a 98,8 Km de Kaunas (que tiene aeropuerto internacional). La Capilla de la Aparición se encuentra en Jono Pauliaus II g. 2, Šiluva 60432, Lituania
El Centro Histórico de Vilna es una de las ciudades medievales mejor conservadas de Europa.
Lituania fue una de las últimas zonas de Europa en aceptar el cristianismo pero hoy en día es la única de las tres repúblicas bálticas que no es ortodoxa, sino católica y uno de los países más creyentes del viejo continente.
La Catedral de Vilna, situada en pleno centro histórico es el edificio religioso más importante de Lituania. La Torre de la Catedral es totalmente independiente del edificio principal.
En la Cripta de la Catedral se encuentra enterrado el Duque de Vytautas el Grande, uno de los personajes históricos más importantes de Lituania.
La Puerta de la Aurora es una antigua puerta de la ciudad de Vilna donde se encuentra una maravillosa capilla y un santuario dedicado a La Virgen María. Se erigió entre 1503 y 1522 para defender la capital del Gran Ducado de Lituania.
El icono de la Bendita Virgen María, Madre de La Misericordia, es una pintura de principios del siglo XVII muy venerada.
La extensa franja de tierra del Istmo de Curlandia en la provincia de Klaipéda tiene casi 100 km de largo y una anchura que va desde los 400 metros a los 4 Km.
Esta barrera de dunas de arena se formó hace millones de años y la Unesco no solo premió la belleza paisajística y la peculiaridad geográfica, si no los arduos esfuerzos de la población que desde hace siglos intenta evitar la erosión del viento y el mar.
Es una zona agreste y sin urbanizar. Un 70 % de su territorio está formado por pinares donde habitan jabalíes, ciervos y alces. Un 25 % lo forman las dunas y un 5% corresponde a Neringa, la única zona urbanizada que está compuesta por cuatro pueblos.
Aquí se forman las dunas móviles más altas de Europa.
En la ciudad de Nida, se puede visitar la casa de veraneo y el museo del famoso escritor Thomas Mann.
La reserva cultural de Kernavé esconde uno de los restos arqueológicos más importantes de los países bálticos, con una datación de asentamientos continuados que llega al paleolítico.
Fue destruida por la Orden Teutónica que pretendía evangelizar el territorio lituano a finales del siglo XI.
En estas colinas se ubicaron una red de defensas con fuertes cubriendo un perímetro de casi doscientas hectáreas, en una posición privilegiada sobre el río Neris.
En el Museo de Arqueología e Historia de Kernavé se muestran objetos hallados durante las excavaciones llevadas a cabo durante varias décadas.
El Arco Geodésico de Struve es un bien cultural e inmaterial compartido con los países vecinos de Letonia, Estonia, Bielorrusia, Rusia, Ucrania y Finlandia.
Premia el esfuerzo colaborativo internacional de varias naciones-y sus científicos- que entre 1816 y 1855 trabajaron siguiendo la coordinación del astrónomo Friedrich Georg Wilhelm Struve (que da nombre al arco geodésico) para fijar los puntos de la triangulación que permitieron medir un tramo importante del meridiano terrestre, y por ende calcular la forma terrestre.
Kaunas (ciudad modernista), declarada Patrimonio de la Humanidad en el año 2023. Se encuentra a 90,9 Km de Siluva.
Entre la primera y la Segunda Guerra Mundial, la ciudad de Kaunas se regeneró por completo gracias a la filosofía arquitectónica del Movimiento Moderno.
En el año 2018, como celebración del centenario de la independencia de Lituania, se inauguró la exhibición: “Arquitectura del optimismo: el fenómeno Kaunas 1918-1940”
El Castillo de Trakai se encuentra a unos 30 km de Vilna.
En una pequeña isla en medio del lago Galve.
Empezó a construirse en el siglo XIV. En el siglo XVII sufrió graves daños durante las guerras contra Moscovia y no fue hasta 1961 cuando se completó su construcción y se convirtió en una de las principales atracciones turísticas de Lituania.
El Monasterio de Pazaislis se encuentra a las afueras de la ciudad de Kaunas.
El complejo de edificios del Templo se considera uno de los mejores ejemplos del barroco italiano en el Norte y Este de Europa.
La historia de este lugar se remonta al siglo XVII. El mayor atractivo del conjunto es la Iglesia Barroca, cuya fachada sur está decorada con un reloj de sol.
El Colina de Las Cruces se encuentra cerca de la ciudad de Siauliai, una de las ciudades más antiguas de Lituania.
Es un lugar único a nivel mundial, donde las cruces han sido erigidas desde la antigüedad para honrar o expresar su gratitud a Dios.
Las cruces se colocaron entre 1831 y 1863 después de dos rebeliones fallidas contra la Rusia Zarista.