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Santo Cáliz y el Año Jubilar
Cada Cinco años, la Archidiócesis de Valencia proclama el Año Jubilar que ha comenzado este 25 de Octubre de 2020 bajo el lema “Cáliz de la Pasión” y culminará el 28 de Octubre de 2021.
La Catedral de Valencia ha custodiado esta Reliquia (el Santo Cáliz) desde que Alfonso el Magnánimo lo trajera a la capital del Turia en 1424 como agradecimiento a la ayuda que el Reino de Valencia le había prestado en sus campañas militares por el Mediterráneo.
El primer destino fue el Palacio Real de Valencia. El día 6 de Enero de 1916 fue trasladado desde el relicario de la Catedral donde permanecía custodiado desde el año 1437 hasta la antigua Aula Capitular de la Seo, actualmente capilla del Santo Cáliz.
El Santo Cáliz no se ha movido de Valencia desde entonces, salvo durante la guerra contra las tropas napoleónicas y durante la Guerra Civil Española, periodos en los que fue trasladado varias veces para evitar su destrucción.
El Papa San Juan Pablo II fue el primer Papa en celebrar misa con el “Cáliz de la Última Cena” en el año 1982.
En el año 2006, cuando Benedicto XVI viajó a Valencia también utilizó el Santo Cáliz en la Eucaristía de la Jornada Mundial de las Familias.
Podéis Leer Toda la Historia del Santo Cáliz en el ebook: «El Santo Grial Siglo I a Siglo XXI» que podéis adquirir en Nuestra Tienda y que los beneficios íntegros irán a Cáritas Diocesanas.
Rezar ante la “Virgen del Buen Parto”
Si vas a visitar la catedral de Valencia y estás embarazada no dejes de visitar a la “Virgen del Buen Parto”. La imagen mariana, del siglo XV y de estilo gótico tardío, se encuentra en la girola de LA SEO, (Catedral de Valencia), desde 1940-42 justo después de la finalización de la Guerra Civil Española, ya que, tras ésta, el coro fue trasladado al ábside.
El lugar concreto de la Virgen del buen parto Valencia lo situamos detrás del Altar Mayor de la Catedral, enfrente de la capilla donde se conserva el brazo izquierdo de San Vicente Mártir, y sobre un pedestal de mármol.
La tradición se inicia el pasado siglo XX cuando un piadoso médico valenciano propició la costumbre de dar 9 vueltas a la Catedral de Valencia, una por cada mes de gestación para pedirle a la Virgen del buen parto Valencia tener un buen parto.
La tradición cristiana dice que se debe rezar en cada vuelta (las 9 vueltas a la catedral de valencia) un Padre Nuestro, un Ave María y un Gloria, y frente a la figura de la Virgen del buen parto Valencia, al empezar y terminar cada vuelta, la oración a Nuestra Señora del Buen Parto:
Dios y Padre nuestro:
que preparaste a la bienaventurada Virgen María
para que fuese digna morada de tu Hijo,
concebido por obra del Espíritu Santo.
Por el parto virginal de María,
convertiste en gozo los dolores de las mujeres que creen en ti,
por el nacimiento de nuestro Redentor,
entregaste a la Humanidad los bienes de la salvación.
Mira con bondad a esta hija tuya,
a quien has otorgado también el don de la maternidad;
y, por intersección de la Madre de tu Hijo,
concédele desarrollar, con salud,
el fruto que le diste concebir,
llegar a un feliz alumbramiento
y emplear la vida entera en tu santo servicio,
el Reino de los cielos.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
La Virgen de los Desamparados
La Virgen de los Desamparados, también llamada La Geperudeta, es la patrona de Valencia.
La historia de esta devoción mariana se remonta al año 1409. Cuentan que Joan Gilabert Jofré, un fraile de la Orden de la Merced y la Redención de los Cautivos se dirigía a la Catedral de Valencia para pronunciar un sermón durante la Cuaresma cuando presenció el linchamiento de un enfermo mental en una calle próxima a Santa Catalina.
Este hecho le llevó a fundar un hospicio para enfermos mentales. La hermandad se constituyó bajo la advocación de “Nuestra Señora de los locos e Inocentes”. El fin de este hospicio era atender a los locos, pero debido a la hambruna que azotaba la ciudad y el gran índice de orfandad causado por la epidemia de la “Peste Negra”, se amplió la Fundación y también se dedicó a recoger a niños que se encontraban abandonados y desamparados.
Dos años después nombraron patrona de la Hermandad a la Virgen, bajo la advocación de la Virgen de los Desamparados.
Cuenta la leyenda que unos años más tarde, en 1414 aparecieron por la cofradía tres jóvenes que, a cambio de recibir alojamiento y comida se ofrecían a realizar una imagen de la Virgen. Pasaron los tres días y al no oírse ruido alguno dentro del lugar conocido como “La Ermita” forzaron la puerta y se encontraron con la imagen de la Virgen María ya terminada pero sin rastro de los misteriosos “peregrinos”.
Pocos días después, la esposa de uno de los miembros de la Hermandad que era paralítica y ciega sanó milagrosamente gracias a la Virgen. Este hecho dio lugar a la “Leyenda” de que aquellos jóvenes que habían tallado la imagen de la Virgen de los Desamparados eran “ángeles”.
En 1493, Fernando el Católico, mediante un Privilegio real, concedió el título a la Cofradía con el nombre de “Verge dels Innoscents e Desamparats”.
El 21 de Abril de 1885, el Papa León XIII concedió una Bula Pontificia por la que nombraba patrona de Valencia a la Virgen de los Desamparados.
Fue coronada canónicamente el 12 de Mayo de 1923
